Como parte de las acciones de cooperación entre la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), durante el mes de septiembre, 10,700 paquetes con artículos sanitarios para prevenir eventuales contagios por COVID-19 serán entregados a las personas migrantes mexicanas repatriadas desde Estados Unidos durante su ingreso terrestre por la frontera norte del país, así como a su arribo por los aeropuertos de la Ciudad de México, Guadalajara y Villahermosa, donde el Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación, recibe a los connacionales y los atiende en su ingreso al país.

Los paquetes, que contienen cubrebocas, guantes desechables, gel, jabón, toallas húmedas antibacteriales, vendas, tiras adhesivas sanitarias, botellas de agua y electrolitos, se suman a los esfuerzos de atención del Gobierno de México en favor de las y los connacionales repatriados.

“La OIM responde tratando de que se tome en cuenta la necesidad de poner a disposición de estas personas insumos básicos que son esenciales para salvaguardar la salud de quienes sean repatriados. Para nosotros, la alianza es muy positiva pues permite asegurar que aspectos de prevención de virus relacionados con la movilidad son tomados en consideración”, explicó la jefa de Misión de la OIM en México, Dana Graber Ladek.

Para la SRE y el INM es de suma importancia la atención de mexicanos repatriados desde Estados Unidos en el contexto de la pandemia por COVID-19. La subsecretaria Martha Delgado reconoció que “este tipo de proyectos no sólo reflejan perfectamente la labor constante de cooperación entre el Estado mexicano y las agencias del Sistema de Naciones Unidas, sino a su vez que esta labor conjunta para atender las necesidades básicas de las personas en situación de migración en el contexto de COVID-19 son para garantizar su integridad y sus derechos humanos, como lo marcan diversos compromisos internacionales en la materia”.

Por su parte, el director general de Derechos Humanos y Democracia, Cristopher Ballinas Valdés, afirmó que entregar estos paquetes “resulta vital para asegurar su protección y reducir el riesgo de contagios, durante su traslado a sus lugares de origen y con ello contribuir a garantizar su derecho humano a la salud”.

La OIM considera que la pandemia de COVID-19, declarada el pasado 11 de marzo, es ante todo una crisis de salud: “la amenaza sigue siendo el virus, no las personas migrantes. La pandemia no tiene fronteras; la gente se ve afectada sin importar su nacionalidad, etnia, religión o estatus legal donde se encuentre”, agregó su jefa de Misión.

El personal del Instituto Nacional de Migración apoyará este proyecto, el cual prevé entregar los paquetes en los puntos de internación de Matamoros, Nuevo Laredo y Reynosa (Tamaulipas); Libertad, Ojinaga y Puerto Palomas (Chihuahua); San Luis Río Colorado, Sonoyta, Sásabe, Nogales, Naco y Agua Prieta (Sonora); Ciudad Acuña y Piedras Negras (Coahuila) y Tijuana, Mexicali y Tecate (Baja California), además de los aeropuertos mencionados.