Roberto Quintero, impulsor del cine entre la comunidad hispana de EEUU

Nunca imaginé que Iron Man me recibiría en la entrada. Así de mágica es la oficina de Roberto Quintero, resguardada tras una pequeña puerta de madera. En compañía de otros superhéroes, el empresario originario de Sonora y radicado en Puebla, centro de México, nos invitó a pasar para conversar sobre migración y cine. 

Cineamérica, la empresa que dirige es una start-up que nació hace tres años. Cuando Roberto dio una charla en una universidad en Puebla, un joven estudiante le contó que su tía había migrado a los Estados Unidos, y que lo que más extrañaba era el cine: “Nos dimos a la tarea de investigar y descubrimos que el mercado hispano en ese país es enorme en el ámbito comercial. Descubrimos que no había cine en el que pasaran las películas mexicanas, viejas, nuevas, de corte de autor, de corte comercial pero además los estrenos de Hollywood”, asegura Quintero. 

Cineamérica busca lograr que las personas migrantes en Estados Unidos puedan tener una experiencia mexicana al ir al cine, tener dos horas en las que puedan ver una película de Pedro Infante y olvidarse de sus problemas, convertir sus salas de cine en Texas en un espacio para la población hispana que guste de las palomitas con chile como se acostumbra en México.. 

Para el empresario, el tema migratorio tiene más de un rostro, no solo está enfocado en convertir a Cineamérica en un cine al estilo mexicano, también sabe que una de las principales aportaciones que puede hacer una empresa es ayudar a regenerar el tejido social. Una propuesta: impulsar la prevención de trata de personas con fines de explotación laboral: “Todas las empresas estamos obligadas a tener un plan de responsabilidad social empresarial, los clientes lo dan por hecho, es un must”, explica. 

 “Es importante ver la migración como algo humano y natural”, cuenta el empresario al referirse a las familias que hace décadas llegaron a Puebla provenientes de España y Líbano, y que hoy han constituido sólidas empresas que emplean a miles de personas. 

Roberto Quintero, nos recuerda que ser parte de la solución es mirar al otro sin temor, con una sonrisa y con mucha empatía.  

Laura Cabello

Laura Cabello